La suerte en el fútbol: el azar es decisivo

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El fútbol es uno de los deportes más populares del mundo y, a lo largo de las décadas, unos cuantos futbolistas de verdadero talento se han hecho un hueco en el candelero. Nombres como Zinédine Zidane, Zlatan Ibrahimović o Ronaldo y Messi son de hecho familiares para todos los aficionados al fútbol e incluso para aquellas personas que sólo lo siguen ocasionalmente. Todos estos hombres eran o son auténticos natos con el balón. Su alto nivel técnico es capaz de encandilar a cualquier aficionado al fútbol. Pero, ¿es realmente pura habilidad o la suerte también juega un papel en el fútbol?

La suerte forma parte de la vida tanto como la mala suerte. Son dos contrapuntos que nos acompañan a todos. Ya sea en el deporte, en la vida profesional o en otros ámbitos como las apuestas en casino777 online, tener suerte siempre es bueno. Algunas personas incluso se denominan verdaderamente afortunadas y atraen literalmente lo positivo en su vida cotidiana. Pero, ¿cómo afecta el factor suerte al fútbol activo y cómo se manifiesta en este deporte profesional?

En el deporte siempre se necesita un poco de suerte, pero…

El deporte es 95% rendimiento y 5% suerte. Vale, es un cálculo ficticio, pero puede ser cierto, porque en todos los deportes, por supuesto, lo principal es rendir bien. Por eso los deportistas de todos los campos entrenan muchas horas a la semana. Su objetivo es mejorar un poco cada día y alcanzar nuevas marcas de rendimiento. Entrenamiento y rendimiento son, pues, dos constantes importantes para todo deportista, pero al final nada funciona sin suerte.

Todo futbolista se alegra cuando el balón cae donde realmente hace daño al adversario. Nos referimos al gol, por supuesto. De hecho, ahora existen análisis en el fútbol profesional que calculan poco después del gol la probabilidad de que se marcara. Estos porcentajes son muy interesantes para los estadísticos y muestran si un gol fue también el resultado de un poco de suerte. Por ejemplo, la probabilidad de marcar un gol es especialmente alta en el caso de un penalti o en una situación en la que un jugador corre libremente hacia la portería contraria, y suele ser superior al 90%. En cambio, los tiros por alto o las piruetas tienen menos probabilidades, pero siempre son espectaculares y, desde luego, no se asocian con mucha suerte.

¿Cómo es la suerte en el fútbol?

De hecho, el factor suerte en el fútbol puede manifestarse de formas muy distintas. A veces se trata simplemente de que el contrario no pase el balón a su propio compañero, sino a un adversario. Sin duda, un pase erróneo de este tipo también se debe a la falta de atención del jugador, pero el otro equipo también puede hablar de suerte en este caso. Un error del portero también está relacionado con la suerte y no pocas veces garantiza que se marque un gol. Otro ejemplo son los centros que en realidad van dirigidos a un destinatario en el área penal contraria, pero que por casualidad caen directamente en la red de la portería. También se suele hablar de suerte en los errores arbitrales, pero en los últimos años se ha producido un cambio significativo en este tema gracias al asistente de vídeo.

La suerte desempeña un papel menor en el fútbol desde la introducción del asistente de vídeo

Las decisiones arbitrales hacen hervir la sangre de futbolistas y aficionados, así como de entrenadores, y no siempre en un sentido positivo. A menudo, los implicados se enfadan por el silbato de un árbitro y lo consideran injustificado, por lo que piensan que la suerte no está de su lado. En la práctica, hace unos años se instauró en el fútbol profesional el asistente de vídeo, que contribuye a que el juego sea más justo en general y a excluir la suerte de las decisiones arbitrales. Al fin y al cabo, estas decisiones no deberían basarse en la suerte o en la opinión equivocada del árbitro, sino en los hechos.

El asistente de vídeo es controvertido, pero sin duda ayuda a garantizar que los resultados finales se basen en las actuaciones de los dos equipos. De hecho, la suerte no tiene cabida aquí, pero no se puede expulsar por completo de este deporte, y eso es bueno. Porque este factor hace que el fútbol sea aún más emocionante y garantiza que no todo salga siempre como los jugadores y entrenadores han planeado.

Cuando los futbolistas hablan del llamado dios del fútbol, la suerte suele estar implicada

Gracias al dios del fútbol. Ahora bien, el deporte suele tener poco que ver con la religión, porque esta actividad es igual para todos y las diferencias de carácter o religión no juegan aquí ningún papel. Sin embargo, en el fútbol se habla de la existencia del llamado dios del fútbol. También se menciona a menudo a Fortuna, la diosa de la suerte. Se trata de la diosa mística de la suerte de la antigua Roma.

Estos dioses suelen ser venerados por los aficionados al fútbol cuando se necesita una chispa de suerte. Y esto a veces parece coronarse con el éxito, porque en el fútbol ya se han dado las coincidencias más extremas que difícilmente podrían explicarse. Que uno quiera creer o no en un posible dios del fútbol depende, en efecto, de cada aficionado. Pero el poder del deporte para hacer feliz a la gente está definitivamente ahí.

Conclusión: la suerte forma parte del fútbol

Sin la suerte, el fútbol sería probablemente casi irreconocible, porque en cada partido de fútbol hay al menos una situación al final que no estaba prevista tal y como sucedieron las cosas. En general, por tanto, puede decirse que el fútbol, como cualquier otro deporte, es una buena mezcla de habilidad y suerte. Esta última es a menudo la responsable de que incluso supuestos «modestos» puedan salir victoriosos de un partido.

Por último, también hay que mencionar el sentimiento general de felicidad, que es capaz de unir en sus corazones a millones de aficionados al fútbol de todo el planeta. Este deporte crea un buen ambiente y un alto valor de entretenimiento. No hay duda de que todas las edades y grupos de aficionados pueden sacar provecho del fútbol. Cualquiera que haya vivido el increíble ambiente que se respira en un partido en directo se hará una idea y entenderá por qué tanta gente en todo el mundo puede ejemplificar el entusiasmo por el popular deporte del balón. Qué suerte que el deporte, y por supuesto el fútbol en particular, sea capaz de unir a la gente.