Osasuna supera los dos primeros tercios de competición en una buena situación y habiendo dejado atrás su peor momento.
A pesar de la derrota ante el Barcelona, el descenso sigue a 6 puntos más el golaverage, lo que le da dos partidos de ventaja a falta de doce por jugar. El equipo lleva varias semanas mostrándose sólido y competitivo, habiendo ganado cuatro partidos en seis jornadas y olvidando esa racha de trece encuentros sin sumar el triunfo que le había dejado en descenso. Todavía queda mucho, pero el cambio de dinámica, los jugadores que se han ido recuperando y sobre todo ver tantos equipos por detrás invitan al optimismo de cara al final de temporada.
Ahora llegan tres partidos ante rivales directo, que de conseguir resultados positivos podrían suponer un golpe casi definitivo en la lucha por la permanencia.