Con el final de temporada llega el momento de pensar en la planificación de la próxima campaña, con la certeza de que habrá muchos cambios en la plantilla de Osasuna.
Hasta 10 jugadores acaban su vinculación con el cuadro rojillo, aunque algunos con opción de prórroga que se conocerá en los próximos días si se ejecuta. Los cedidos Róber Ibáñez y Sebas Coris volverán a sus actuales equipo, algo que pasará también con Borja Lasso que tenía opción de compra obligatoria, pero siempre y cuando hubiera ascenso a Primera. Por tanto estos tres cedidos no seguirán en Pamplona, lo que se espera que pase también con el otro futbolista que llegó a préstamo. Por el argentino Arzura existe una opción de compra de 1,7M€ que no se espera que se ejecute, ya que es mucho dinero para un equipo de Segunda y siendo que sólo ha sido titular en 13 jornadas. De los jugadores que pertenecen al club, pero finalizan contrato, sólo De las Cuevas y Buñuel tienen años opcionales. El alicantino firmó hasta 2018 con un año extra, sin conocerse las circunstancias que lo activarían, aunque no parece que se hayan cumplido. Para que siga Buñuel, la decisión la tiene que tomar el club, que tiene la opción unilateral de ampliarle hasta 2020 después de su cesión al Valencia B. Los otros cuatro jugadores que finalizan contrato son Miguel Flaño, Javier Flaño, Tano y Manu Herrera, de los que también sorprendería que continuara alguno. Quizá el capitán sea el único que tiene opciones después de haber sido titular en el tramo final de la temporada, pero no hay nada claro.
La salida de estos jugadores, unida a la lesión de Sergio Herrera, obliga a Osasuna a tener que recuperar cedidos, promocionar canteranos o incorporar jugadores de otros equipos.
Todos fuera. Solo renovaria a Tano y Buñuel.