El centrocampista rojillo seguirá ligado a Osasuna una temporada más. El haber jugado la primera mitad en Vallecas hace que se ejecute automáticamente su cláusula de renovación.
Las negociaciones de ampliación de contrato entre Pablo Ibáñez y el club estaban estancadas, pero quedaba esa opción de que si disputaba 45 minutos en un mínimo de partidos su contrato se prorrogaban hasta junio de 2025. El navarro será por tanto un jugador más de la plantilla que esté a las órdenes del próximo entrenador en la 24/25, y habrá que ver si en los próximos meses fructifica una nueva renovación.