Hace 16 años Osasuna logró también el ascenso a Primera División, aunque en esa ocasión era una situación diferente ya que el periplo por la categoría de plata había sido de seis temporadas.
El conjunto rojillo apostó también por mantener el bloque, lo que parece que sucederá este verano, y contaba con varios navarros entre sus jugadores más utilizados. La apuesta fue fichar jugadores de Segunda División y buscar cesiones de equipos de Primera. En este caso hubo otra baja importante como la de Merino, ya que Orbaiz era otro joven canterano e internacional que se marchaba una vez finalizada la temporada. Costó mucho sustituirle, fichando a Lecumberri y a un inédito Shustikov que ni siquiera acabó la pretemporada, llegando después Ángel Rodríguez, que tampoco se ganó el sitio. Esto obligó a fichar en el mercado invernal al Pipa Gancedo. Para la delantera se apostó por dos arietes de la categoría de plata como Sabino y Armentano, que aportaron pocos goles y no lograron quitarle el sitio a un excepcional Iván Rosado. En la defensa se optó la cesión de un joven Aitor Ocio y el fichaje de un veterano como Vidakovic. Ambos tuvieron partidos como líberos, y es que en esa etapa Osasuna jugaba también con tres centrales y dos carrileros. En la banda izquierda, donde jugaba Ibán Pérez, se ficho a Sena y Moha. El primero apenas jugó y estuvo a punto de salir en el mercado invernal, y el segundo tuvo una larga trayectoria como rojillo, pero no contó ese primer año. Por eso se reforzó a mitad de temporada con Llorens, cedido por el Atlético de Madrid. Otro que llegó cedido fue el portero portugues Nuno, al que el Depor quería dar minutos en Primera y que jugó casi toda la temporada. Todavía hubo tiempo de, a falta de pocas jornadas, incorporar a Gerardo debido a una lesión en la mandíbula de Alfredo.
Por tanto parece que hay muchas similitudes con lo que puede ser el próximo verano. Ya que se comparte el sistema, la idea de mantener el bloque, muchos navarros como titulares y se pierde a un prometedor canterano. Sin embargo en aquella temporada se gastó dinero en refuerzos, por ejemplo Armentano fue el fichaje más caro de la historia del club en aquel momento tras pagar 180 millones de pesetas al Elche, algo que no parece que vayamos a ver en 2016.
Esperemos que se fiche con cabeza y los que vengan que tengan un puntito más de calidad que los chicos de casa. Un goleador también es necesario.