El pasado mes de enero Osasuna incorporó al delantero paraguayo para dotar a su ataque de más carácter y gol. El bajo rendimiento de su compatriota Ariel Núñez, la situación de Nino y las dudas sobre Manu Onwu le situaron nada más llegar como segundo delantero del equipo.
Acuña es un delantero rápido y fuerte que se deja todo sobre el césped, argumentos más que de sobra para que tuviera minutos. Pero la realidad es que ha jugado menos de lo esperado, siendo titular en tan sólo un partido y acumulando menos de 350 minutos en Liga. A Javi Gracia no le gusta jugar con dos delanteros y, siendo Oriol Riera un jugador imprescindible, eso le dificulta mucho contar con minutos. Cuando ha jugado no ha parado de correr e incluso marcó un gran gol ante el Sevilla, pero saliendo al campo a partir del minuto 80, es difícil que pueda cambiar el rumbo del encuentro con su intensidad.
En estos partidos en los que Osasuna se juega toda la temporada, no estaría de más verle en el campo si el resultado no es favorable para los navarros, ya que es de los pocos que puede cambiar al equipo saliendo desde el banquillo. El equipo ha carecido de intensidad, y eso es justo lo que él aporta.
No se pa ke lo ficharon si no juega nada y Gracia no confia en el.
Lo de Nuñez no se entendía muy bien, pero lo de Acuña cuando se han tirado a la basura la tira de puntos, mucho menos.