Osasuna pierde la categoría a falta de cuatro jornadas para el final de Liga. La derrota rojilla, unida a la victoria del Leganés, certifica el descenso matemático.
El conjunto navarro volverá a la categoría de plata tan sólo un año después de haber logrado el tan celebrado ascenso. Los horribles resultados que se han dado durante todo el año han hecho imposible desde hace meses pensar con una posible remontada. La etapa de Martín no fue buena, pero nada tuvo que ver con lo que vino después. Caparrós le sustituyó con un pésimo bagaje de cinco derrotas en cinco jornadas. Fue entonces cuando Vasiljevic cogió las riendas del equipo y, pese a reactivarlo anímicamente y jugar buenos partidos, no logró tampoco buenos resultados. Sólo en las últimas jornadas se consiguieron dos victorias seguidas y, de haber ganado también al Sporting, hubiera habido alguna posibilidad remota. Sin embargo el equipo siguió perdiendo puntos a causa de sus errores defensivos hasta perder la categoría de nuevo.