Como durante toda la temporada, siguen los problemas en Osasuna para tener a todos los jugadores a disposición del técnico. Si bien Cadamuro y Nekounam ya se han incorporado a los entrenamientos, las lesiones han dejado a varios rojillos entre algodones.
Merino, uno de los mejores en la actual racha, sufrió ayer un giro en la rodilla y no ha entrenado a la espera de ser valorado por los servicios médicos. Kodro y Nino, que sufrieron diferentes golpes, han hecho trabajo parcial y José García, con una luxación en el hombro, también. Como nota positiva está la recuperación de Oier y Lotiès que va por buen camino y, por primera vez desde sus graves lesiones, han trabajado parcialmente con el grupo y podrían estar listos a final de mes.
Si la nieve no lo evita Osasuna jugará este sábado en Mendizorroza ante el Alavés y el próximo martes ante el Zaragoza en El Sadar. Habrá que ver como evolucionan y sino, una vez más, tirar de los jóvenes del Promesas.