No está siendo una temporada fácil para Arrasate, que semana tras semana ve como no puede contar con alguno de sus jugadores más importantes.
A las llegadas tardías de Jony y Budimir, que evitaron que pudieran jugar las primeras jornadas, se han unido numerosas bajas por problemas físicos. Además han sido protagonizadas por jugadores que estaban llamados a ser importantes y en la mayoría de los encuentros titulares. Lucas Torró, primer fichaje de este verano, sufrió ayer su segunda lesión muscular. Roberto Torres es otro que se perdió dos jornadas, Aridane se perdió otros dos partidos, y al volver sufrió un fuerte esguince de rodilla que le mantiene de baja. Misma lesión que vivió Calleri, y que todavía le mantiene apartado. Budimir, además de llegar tarde como comentábamos, dio positivo en coronavirus y se perdió dos jornadas más. Y a ellos hay que añadir a Brasanac, que podría volver el próximo partido, pero que ya se habría perdido los 8 primeros partidos.
A parte están los casos de Brandon y Chimy Ávila, recuperándose de sus roturas de ligamento cruzado anterior. El balear estará pronto de vuelta, mientras que el argentino podría ser baja hasta abril.