Según ha desvelado el Diario de Navarra, el extremo valenciano estaría a punto de firmar su salida de Osasuna.
La trayectoria de Róber Ibáñez como rojillo ha estado marcada por multitud de entradas y salidas, y parece que va a seguir siendo así. Jugó dos medias temporadas en Segunda como cedido, y el verano pasado con el ascenso firmó ya en propiedad a cambio de 2M€. Su año no ha sido fácil, ya que los numerosos problemas físicos no le permitieron rendir como se esperaba, y ahora el club vería con buenos ojos su salida en forma de cesión. Según la publicación se marchará a préstamo al Leganés, donde ya jugó, pero con una cláusula de compra obligatoria en caso de que los madrileños ascendieran a Primera.
Con contrato hasta 2023, el Getafe se guardó el 50% de un futuro traspaso, lo que haría imposible recuperar la inversión salvo que sucediera como con Brandon, que se habó de un 50% de los derechos económicos y luego se trataba sobre una posible plusvalía.
