El entrenador andaluz ha escrito una carta de despedida en la que sólo tiene buenas palabras hacia el club navarro y su afición. Dos meses después de su fichaje se marcha destituido y sin haber logrado ningún punto en Liga.
Carta:
Tenía una idea formada sobre lo que era Osasuna antes de llegar al club el pasado mes de Noviembre y he terminado esta etapa sabiendo que esas sensaciones eran correctas, incluso me quedaba corto, porque se trata de un club ciertamente especial.
Encarábamos así un proyecto muy ilusionante en un club que encajaba con mi manera de entender el fútbol y la vida. Y el hecho de no haber podido llevar a buen puerto ese proyecto hace que me vaya apenado, pero también agradecido.
Agradecido a la afición y la ciudad. Tanto mi entorno como yo fuimos acogidos de una manera espectacular. No puedo más que sentir orgullo de haber pertenecido a Osasuna y estar arropado por sus seguidores desde el primer día.
Agradecido a los futbolistas por su entrega e implicación. Es un gran grupo de profesionales del que estoy convencido que puede lograr el objetivo de la permanencia.
Agradecido al club y sus trabajadores, parte y esencia de ese adn diferenciador.
Por todo ello sólo puedo desear la mayor de las suertes al equipo. Quedan muchos puntos en juego y muchas batallas por dirimir y espero que el plantel sea capaz de cambiar las tornas y lograr la salvación.
¡Gracias Osasuna, gracias Pamplona!