Jan Urban aceptó el reto de entrenar a Osasuna en el año más complicado que se recuerda. Con el descenso, los problemas económicos y una plantilla excesivamente corta se tuvo que enfrentar para confeccionar su equipo.
Una frase quedó grabada para todos en el inicio liguero: «Somos pocos, pero buenos«. Parecía que podía ser el lema de una etapa de comunión entre afición y equipo con la cantera por bandera. Pero el resultado ha sido otro. En los 26 partidos de Liga, el técnico polaco ha utilizado a 27 jugadores de los 31 diferentes que ha llegado a convocar. Las lesiones y las convocatorias internacionales han sido el gran quebradero de cabeza del técnico a la hora de encontrar un once ideal sobre el que trabajar. Se podría decir que en ninguna línea, a excepción de la delantera, ha encontrado nombres sobre los que mantener cierta regularidad.
– En la portería comenzó Asier Riesgo como titular, quien después de varias temporadas de suplente parecía que iba a tener su gran oportunidad. Después de pocas jornadas decidió cambiar y alinear a Roberto Santamaría, quien sí le convenció. También se estrenó en una convocatoria Jokin Ezkieta.
– La línea defensiva ha sido toda una locura, utilizando a Silva y Oier en la primera jornada, quienes no volverían a jugar por diferentes motivos, con Miguel Flaño como único fijo pese a su rendimiento, y con enormes decepciones como Cadamuro. También utilizó al polivalente Echaide, a Lotiès hasta su lesión, a Unai García antes de su salida y a la revelación David García. Con el campeonato empezado llegó Vujadinovic quien sí se ganó el puesto. Otro muy utilizado ha sido Javier Flaño, mientras que De Frutos ha ido convocado, pero sin llegar a debutar.
– En el mediocampo tampoco fue capaz de encontrar un nombre alrededor del que construir el equipo. Raoul Loé es el único que siempre, excepto en un partido, fue titular, alternando acompañante con Merino y Nekounam. Pocas oportunidades tuvo Maikel Mesa, que vio como le pasaba por encima un joven de calidad como Olavide. En banda De las Cuevas era el otro indiscutible hasta su salida. Teniendo como acompañantes a Kodro, Sisi, Roberto Torres o Cedrick entre otros. Menos minutos tuvieron José García y Berenguer, y no jugaron pese a estar convocados Barja y Yoel Sola.
– En la delantera un nombre sobresale por encima del resto: Nino. El veterano ariete ha sido el único capaz de hacer gol y mantenerse cada jornada en el equipo titular gracias a su entrega. Manu Onwu apenas jugó y tuvo que buscarse una salida, y Ansarifard no ha sido capaz de marcar en los partidos que le dio el polaco.
Un lema que será recordado, pero que para nada será respaldado por la estadística de jugadores utilizados. Muchos nombres, demasiados onces y poca continuidad. Entre lesiones, internacionales y decepciones ha sido imposible encontrar un equipo y dar solidez. La buena noticia es que los jóvenes canteranos han podido sacar provecho de esta situación y ganarse minutos. Suerte Jan.
Yo veo el futuro rojillo cada día que pasa más negro.