El mediocentro ghanés llevaba varias semanas sin poder entrenar al 100% por unas molestias que arrastraba desde la Copa de África. Tras unas pruebas realizadas por el club, han detectado una fractura trabecular en el astrálago de su pie derecho.
El periodo de recuperación se estima que estará en 4 semanas, que sumadas a las que lleva sin porder participar por esta lesión, más el tiempo que estuvo fuera con su selección nos lleva a preguntarnos si la del jugador del Schalke 04 ha sido una de las peores operaciones recientes de Osasuna. Además, hay que recordar que estuvo incluido en la convocatoria ante el Atlético cuando ya tenía el pie roto. Menos mal que no tuvo la oportunidad de jugar, porque sino quien sabe que podría haber pasado.