Tras la victoria en Valencia parecía que Osasuna había encontrado el camino para ganar partidos y no pasar apuros de aquí a final de Liga. Pero nada más lejos de la realidad, de nuevo se han vuelto previsibles y han perdido tres partidos seguidos con un planteamiento poco valiente. Ante Athletic, Betis y Atlético, los navarros merecieron mejor suerte, pero hay que saber ejecutar ese dominio territorial.
Mendilíbar obtuvo buenos resultados alineando a tres mediocentros, lo que le valió para apostar por un sistema más defensivo que, cuando el equipo tiene el balón, sitúa a Oier como mediapunta. Esto le ha supuesto tener más control del partido, pero le ha restado pegada, y eso que antes ya se tenía poca. En el último partido, además de prescindir de un mediapunta para alinear a los tres mediocentros, apostó por Masoud como falso nueve. Si se unen que el Atlético de Madrid es el equipo menos goleado, que Osasuna es el menos goleador y que se juega sin delantero centro, el resultado no puede ser otro que no conseguir marcar. El técnico vasco ya exprimió al máximo el trivote hace semanas, por lo que seguir estirando este sistema no tiene sentido ya que no se ha ganado en seguridad defensiva. Lo lógico sería volver a optar por mejores atacantes que den mayor efectividad al equipo y permitan ser más verticales.
A lo largo del campeonato, estamos viendo que los navarros son un equipo de rachas, que pierde muchos partidos y de repente tienen un arreón de resultado que le hace escalar en la tabla. En Febrero se había tenido la mejor racha de resultados de la temporada que le había permitido alejarse del descenso, pero con estas tres derrotas, se ha dado un tremendo paso atrás. Hay que dar gracias de que el resto de rivales están también a muy poco nivel, lo que ha permitido que el descenso esté todavía a 4 puntos. Pero mucho cuidado. El Deportivo parecía sentenciado, y tras ganar al Celta se sitúa a dos partidos del Zaragoza, que marca la zona de salvación, teniendo que enfrentarse a ellos próximamente. El equipo maño es uno de los que ha ido de más a menos. En las primeras jornadas de Liga consiguió un buen colchón, pero los once partidos que lleva sin ganar y su calendario les sitúan en una posición muy incómoda, aunque sigue fuera de descenso. El Mallorca, que se encaminaba a Segunda hasta la llegada de Manzano, empezó a ganar partidos y está a dos puntos de la salvación a pesar de su última derrota. El Granada está con los mismos puntos que Osasuna y todavía tiene que recibir a los navarros en Los Cármenes, lo que de la cierta ‘ventaja’. El Celta se está complicando con el paso de los partidos, y ahora ante la previsible sanción a Iago Aspas lo va a tener muy difícil.
Quedan diez jornadas para el final, cuatro de ellos en el Sadar y Osasuna tiene cuatro puntos sobre el descenso. En mi opinión, los navarros no son uno de los tres peores equipos, además han demostrado saber competir, por lo que pienso que se conseguirá el objetivo. Pero no se pueden seguir desaprovechando partidos, hay que saber cerrar los encuentros cuando se dominan, y sino ser capaces de empatar. Mendilíbar lleva mucho tiempo con esta plantilla como para tener más definido el sistema y el once titular. Ahora es el momento de pelear los puntos, los últimos 30 del campeonato, ya no se puede fallar.
mucha razon en todo q ya vale de lamentos, de merecimos mas y de q el arbitro nos roba. han sido 3 partidos para ganar y no hemos sacao ni un punto. con lo mal q estan los de atras se podia haber dejado el descenso a 10 puntos
Mendi es un técnico trabajador pero no sabe leer los partidos y reaccionar en los momentos puntuales. De ahí que este año Osasuna siempre pierda cuando se le adelantan en el marcador los equipos contrarios.
O espabilamos o a Segunda. Hay que salir al campo con otra actitud.