El pasado verano la portería de Osasuna sufrió un cambio radical al marcharse los cuatro porteros del equipo. Nauzet y Mario Fernández fueron los encargados de sustituirles, y de momento el canario está cumpliendo en el marco rojillo.
En la complicada campaña pasada, Roberto Santamaría y Riesgo se repartieron casi por igual los partidos ligueros. El navarro, que tenía un año más de contrato y parecía que iba a seguir, pero rescindió con Osasuna y firmó por la Ponferradina, donde es titular indiscutible. Riesgo, que en cinco años no logró nunca jugar más de catorce partidos seguidos, encontró acomodo en el Eibar de Primera División. No le puede estar yendo mejor bajo las órdenes de Mendilíbar, siendo uno de los equipos revelación, encajando sólo un gol por partido y habiendo renovado recientemente. Los más jóvenes no están teniendo tanta suerte. Ander Cantero, la eterna promesa de Tajonar, tuvo que marcharse al filial del Villarreal ya que el club no quería hacer frente a su contrato. En el conjunto amarillo todavía no ha debutado, siendo suplente todo el campeonato de Aitor Fernández. El caso de Ezkieta es diferente, ya que el club sí quería que siguiera, pero aprovechó una cláusula de su contrato para marcharse libre al filial del Barcelona. Por la sanción del conjunto culé, no pudo ser inscrito hasta hace dos semanas. De momento ha sido convocado en las últimas dos jornadas, pero sin llegar a debutar.
En un verano de cambios, la portería rojilla dio un vuelco, con mejor y peor suerte para unos y otros.