Pólvora mojada

Osasuna nunca ha sido un equipo de delanteros muy goleadores aunque sí que suele tener algún ariete referencia. El último fue el Rifle Pandiani y, tras decidir no renovarle, había que buscar otro jugador que asumiera la responsabilidad de marcar.

El club navarro se decantó por Nino, un delantero diferente a ese habitual nueve de Osasuna. La referencia ofensiva solía ser un futbolista más físico, de mayor envergadura, dispuesto a presionar y marcar diferencias en el juego aéreo. En cambio Nino es un cazagoles, delantero listo y rápido que vive en el área. Su misión no es bajar balones largos, no abre espacios luchando con los centrales, él es otro tipo de jugador. A lo largo de su carrera no ha parado de marcar goles, sobre todo en Segunda División donde ha convertido la friolera de 150 tantos con Elche y Tenerife. En Primera División sólo había tenido dos experiencias, una mala en el Levante y otra buena con los canarios. En Osasuna, conocedores de su trayectoria, no dudaron en ningún momento de la garantía de gol que iba a suponer su fichaje.

En el inicio de la temporada se vio a un Nino bipolar, con buenas actuaciones en casa donde el equipo tenía el dominio, y más desaparecido a domicilio donde los rojillos perdían la posesión. Sus goles en las tres victorias de Osasuna contrarrestaban sus fallos ante Atlético y Sevilla, contra quienes falló lo que nunca perdonaba. En esos partidos jugaba junto a Kike Sola, un delantero más físico, que luchaba los balones aéreos y presionaba a las defensa rivales. Los números goleadores del navarro bajaron, pero su trabajo beneficiaba a Nino y por ende al equipo. Con la entrada definitiva de Raúl García en el once titular, Mendilíbar se ‘cargó’ a uno de los dos delanteros y entonces Nino empezó a jugar como único punta, y es ahí cuando comenzó su bajón.

El delantero andaluz acumula ya siete partidos sin marcar, algo poco habitual en él. Esto unido a la irrupción de Ibrahima y la buena actuación copera de Leka hacen que se empiece a cuestionar su titularidad. Desde mi punto de vista, y sabiendo que Mendilíbar no va a cambiar su sistema para volver a jugar con dos puntas, creo que no estaría de más probar con otro delantero. Sobre todo en los partidos fuera de casa en los cuales Nino todavía no ha marcado en los 722 minutos que ha disputado lejos del Sadar.

7 comentarios

  1. Hay que tener paciencia, Nino es un cazagoles contrastado y volverá por sus fueros a pesar de que el sistema de juego de Mendilibar no le va.

  2. Sorauren says:

    Nino quien te ha visto y quien te ve. Hay que marcar ya.

  3. Gurea Gorri says:

    Nino enchufará el Domingo

  4. Que así sea y que sirva para ganar el partido.

  5. markuleta says:

    Nino confiamos en tu olfato goleador, mañana puede ser un gran día.

  6. Por lo que he visto, poco, para jugar con un delantero me quedaría con Leka. Una lástima que Nino se esté diluyendo, y que el juego del equipo no le ayude, pero quizás haya que probar con el serbio. Ibrahima lo veo muy útil también pero posee poco gol, al igual que Kike Sola.

  7. José Carlos Valenciano says:

    Estoy de acuerdo, yo tambien apostaría por Leka. Hoy ha jugado bien y tanto en Copa como en pretemporada ha demostrado tener gol. De Nino esperaba más, pero ya digo que como único punta baja su rendimiento. Respecto a Ibra, yo creo que sí que tiene gol, de hecho es el pichichi del equipo.

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